Franquicia Anytime Fitness: ¿Qué es la Teoría del Caballo Muerto y cómo aplicarla a tu empresa?

Por: Estivaly Calva Tapia

La obstinación es de lo peor que le puede pasar a una persona. Insistir en el error. Ser terco (a). La “Teoría del Caballo Muerto” es una metáfora que ilustra la tendencia de individuos y organizaciones en persistir en algo que ha fracasado, incluso cuando es evidente que no está dando resultados.

"El sabio puede cambiar de opinión. El necio, nunca."

Immanuel Kant, filósofo

La “Teoría del Cabello Muerto” destaca la importancia de reconocer cuándo es momento de “desmontar” y dejar un proyecto, idea o estrategia que ya no funciona y evitar seguir perdiendo tiempo, dinero y esfuerzo. De aquí la importancia de cambiar de rumbo y buscar nuevas oportunidades.

Lo mejor es fallar rápido y aprender rápido. Si cometes un error hay que hacer cuatro cosas: reconocerlo, aprender de él, aceptarlo y soltarlo. Por eso, es muy importante identificar lo que está mal lo más pronto posible, y no desgastarse más.

Hoy los emprendedores y emprendedoras que tienen éxito en todo lo que emprenden están aplicando lo siguiente:

"Trabajar de forma más inteligente, no más dura."

Un caso de éxito es Marcelo Pérez, un multifranquiciatario de Anytime Fitness, una cadena global de gimnasios de 24 horas. Su mejor consejo es el siguiente: “Hay que trabajar duro, pero no nada más esforzarse al máximo, sino ser estratégico. Tratar de ser inteligente y priorizar en qué inviertes tu tiempo”.

¿Qué hacer antes “desmontar” el caballo muerto?

El consultor organizacional, Jesús Rodríguez, explica que la aplicación de la Teoría del Caballo Muerto en el mundo de los negocios requiere un análisis profundo del contexto y de los detalles específicos de cada situación.

“No existe una fórmula mágica ni una receta única para saber cuándo es momento de desmontar el caballo muerto. Cada empresa, cada proyecto, cada estrategia, es diferente. Lo que funciona para una organización puede no ser adecuado para otra”, asegura Rodríguez.  

Por lo tanto, es fundamental analizar el contexto específico en el que se encuentra tu empresa, proyecto, estrategia, producto o algún proceso que alguna vez fue exitoso, antes de tomar cualquier decisión.

 

Seguir adelante

Para no aferrarse a algo fallido es necesario abrir los ojos y darse cuenta que estás equivocado. No seguir insistiendo en el error. La metáfora del caballo muerto enseña que una idea que no funciona ya no debería ser tu enfoque.

"Cuando descubres que estás montando un caballo muerto, la mejor estrategia es desmontar.

Enseñanza de los Dakota, pueblo indígena de EE.UU."

“La Teoría del Caballo Muerto nos invita a reflexionar sobre la importancia de reconocer cuándo un camino ha llegado a su fin. La sabiduría ancestral nos recuerda que, ante una situación insostenible, lo más sensato es dejar de insistir en lo que ya no funciona”, expresa Jesús Rodríguez, consultor de gestión de empresas.

 

Los síntomas de la “Teoría del Caballo Muerto”

Así que, ya no sigas invirtiendo tiempo, recursos y esfuerzo en proyectos, ideas o estrategias que no son viables o efectivas. Los “síntomas” de estar montando en un caballo muerto son los siguientes:

• Resistencia al cambio: Las personas o equipos muestran una fuerte resistencia a cambiar de dirección, incluso cuando hay evidencia clara de que el enfoque actual no está funcionando.
• Justificaciones continuas: Se presentan constantes justificaciones para continuar con un proyecto o estrategia fallida, a menudo basadas en inversiones pasadas.
• Negación de resultados: Ignorar o minimizar los datos y resultados negativos que indican que el proyecto no está dando frutos.
• Falta de innovación: La incapacidad para explorar nuevas ideas o enfoques debido a la obsesión por un proyecto que ya no es viable.
• Desmotivación del equipo: Los miembros del equipo pueden sentirse desmotivados o frustrados al ver que se sigue insistiendo en algo que claramente no funciona.
• Aumento de recursos sin resultados: Se siguen asignando más recursos (tiempo, dinero, personal) a un proyecto sin obtener resultados positivos.
• Culpa externa: Atribuir el fracaso a factores externos en lugar de reconocer que el enfoque actual es ineficaz.
• Fuga de talento: La falta de progreso puede llevar a la pérdida de talento clave, ya que los empleados buscan oportunidades más prometedoras en otros lugares.
• Confusión estratégica: La organización puede experimentar confusión sobre su dirección estratégica debido a la falta de claridad sobre qué iniciativas son realmente valiosas.
• Baja moral: Un ambiente laboral negativo puede surgir cuando los empleados sienten que están perdiendo tiempo y esfuerzo en algo sin futuro.

Reconocer estos síntomas es crucial para cualquier emprendedor que quiera ser mejor. Abandonar un “caballo muerto” puede ser difícil, pero es necesario para seguir avanzando hacia nuevas oportunidades y enfoques más productivos.

 

¿Por qué nos aferramos? La Teoría del Caballo Muerto

Aferrarse a “caballos muertos”, es decir, a proyectos, ideas o situaciones que ya no son viables, es un fenómeno común y puede deberse a varias razones psicológicas, emocionales y sociales.

Estas son algunas de las principales razones por las cuales las personas se aferran a lo que ya no funciona:

• Inversión emocional y financiera: Las personas suelen sentir que deben continuar invirtiendo en algo porque ya han gastado tiempo, dinero o esfuerzo en ello. Esta es una forma de la falacia de costos hundidos, donde se toma decisiones basadas en inversiones pasadas en lugar de en el valor futuro.
• Miedo al cambio: Cambiar de dirección puede ser aterrador. La incertidumbre sobre lo que vendrá puede llevar a las personas a preferir lo conocido, incluso si no es efectivo. A veces, permanecer en una situación familiar, aunque sea insatisfactoria, se siente más seguro que arriesgarse a explorar nuevas oportunidades.
• Presión social y cultural: Las expectativas de colegas, superiores o la cultura organizacional pueden presionar a las personas para que continúen con un proyecto, incluso si saben que no está funcionando. En algunos entornos, hay una norma implícita de no rendirse o abandonar proyectos, lo que puede llevar a la persistencia en situaciones poco prometedoras.
• Identidad personal: Las personas pueden sentirse emocionalmente vinculadas a un proyecto o idea porque han invertido su identidad en él. Abandonarlo puede sentirse como una pérdida personal. La necesidad de demostrar competencia y éxito puede hacer que las personas se aferren a proyectos fallidos para evitar parecer fracasados.
• Falta de visibilidad: A veces, las personas pueden estar tan inmersas en un proyecto que pierden la capacidad de ver objetivamente sus resultados negativos. La creencia de que “las cosas mejorarán” o “el próximo intento será el correcto” puede llevar a la persistencia en situaciones desfavorables.
• Falta de alternativas claras: Si no hay una opción clara o viable disponible, las personas pueden sentirse obligadas a seguir adelante con lo que tienen. La indecisión sobre qué camino tomar puede hacer que uno se aferre al status quo.

En conclusión: Es importante entender por qué nos aferramos a los caballos muertos. Ese el primer paso para aprender a soltar lo que ya no sirve y abrirse a nuevas oportunidades.